El general de Carabineros Carlos González, jefe de Control y Orden Público en la Macrozona Sur, es quien está a cargo de los funcionarios de Control y Orden Público entre el Biobío y Los Lagos. Sin embargo, su centro de operaciones está en La Araucanía, zona que ha visto un recrudecimiento de la violencia en el último tiempo.

En entrevista con La Tercera, González se mostró crítico tanto con los detenidos por hechos de violencia, como por las medidas de protección dispuestas por el Ministerio Público a predios que han sido objeto de ataques. "Todos los detenidos que hemos tenido, de una u otra manera, están involucrados en esta orgánica del narcotráfico. Hoy día está a la vista y paciencia de la ciudadanía que estos grupos, más allá de mantener la bandera de la reivindicación territorial, están tras organizaciones criminales", señaló el uniformado.

Pero además, el general acusó que las órdenes de resguardar propiedad privada de gran extensión atentan contra la labor preventiva de la institución. "Tenemos a más de 730 hombres (...) en medidas de protección que ha dispuesto una fiscalía del Ministerio Público. Finalmente pierdo 730 hombres para hacer una prevención y eso es relevante: yo no puedo estar cuidando, porque así lo decreta un mandato judicial, un fundo que tiene 4 mil hectáreas. No puedo. Yo debo estar haciendo prevención para detener y contrarrestar los ataques de estos grupos de delincuentes que andan asolando los distintos sectores de La Araucanía", dijo González, al tiempo que calificó a los carabineros en la zona como "héroes", con "un corazón que no les entra en el pecho".

"Nosotros hemos conversado en distintas jornadas sobre cuál es el bien jurídico que yo voy a proteger... ¿Voy a proteger a don Juan X que está siendo víctima de un hostigamiento por parte de una comunidad o por parte de un grupo de delincuentes, o voy a cuidar 4.854 plantas de pino insigne que están al interior de un fundo? ¿Qué es lo primero? ¿A qué enfocamos el esfuerzo institucional?", cuestionó el general.

Caso Marchant

El alto oficial de la policía uniformada también se refirió al comunero mapuche y dirigente de la CAM Pablo Marchant, muerto en un enfrentamiento con Carabineros en Carahue. Al respecto, González recalcó que Marchant "portaba un fusil de guerra" al momento de morir.

"Nadie en este país puede tener, poseer o transportar un arma prohibida por ley. Por lo tanto, cuando hablamos de una persona fallecida, sí, es lamentable. Ahora, nosotros no nos levantamos en la mañana para ir a enfrentarnos y dejar un civil muerto, pero te insisto, este delincuente portaba en sus manos un fusil de guerra, él atacó a carabineros, un trabajador que dejó herido aún está con riesgo vital", sentenció González.

Imagen: UATV Noticias