El matrimonio, sin convivencia previa, es una insensatez

El matrimonio, sin convivencia previa, es una insensatez.

Permítame explicarle mi punto de vista, que quisiera que lo analizara tomando en cuenta los profundos cambios que se han producido en nuestra sociedad , en que el matrimonio se le considera cada vez más un producto desechable, en que abundan hombres y mujeres "estafadoras sentimentales", que se casan por conveniencia, en que el consumismo forma parte de nuestras vidas y está presente en cada hogar y familia.

Partamos entonces por la primera etapa de la relación sentimental, que siempre está saturada de mucha pasión, los posibles defectos de la pareja están absolutamente anestesiados por esa etapa maravillosa en que todo se ve color de rosa, se siente el amor con muchísima intensidad, todo parece perfecto.Uno desea con todas sus fuerzas que tanta maravilla perdure en el tiempo y se cree que con el matrimonio, se colocará la guinda a la torta. Más felicidad imposible.

Ese será su primer error.

Tomar una decisión tan trascendental en su vida mientras se está drogado de exquisitas sensaciones , en que la sensación es estar permanentemente en "las nubes", extasiado de felicidad, de dicha, es de una desinteligencia tremenda.

¿Y sabe por qué hay que evitar semejante tontera?

Porque la pareja vive separadamente, por tanto se ven a ratos y en esos momentos se procura pasarlo lo mejor posible, mostrar lo mejor de uno, hay pasión, harto sexo, la adrenalina fluye a chorros, la aventura por descubrir lo desconocido exita , todo es magia.

Pero en la segunda etapa, al decidir compratir la vida bajo el mismo techo, se aterrizan las ilusiones, los proyectos idílicos, la idealización de la pareja.Tarde o temprano decrece la pasión y empiezan a notarse marcadas diferencias en costumbres, hábitos, opiniones de cómo organizar sus vidas, el tiempo libre, las tareas domésticas, los gastos. No son pocos los que intentan someter a la pareja, más que convencerla con argumentos lógicosrespecto a la conveniencia de hacer algo o organizarse de una forma determinada.

Obviamente, con sólo el hecho de que la pareja nos trate de obligar a aceptar su postura, sus ideas, genera una reacción desfavorable o negativa en su contra. Empiezan los primeros roces. Es lo que llamo el inicio de la verdadera "etapa de prueba" de la pareja.

Se descubre al otro tal cual como es, en el diario vivir, minuto a minuto, se revela como reaccionan ambos ante los problemas cuotidianos, la repartición de responsabilidades y puede o no abrirse una puerta a un mundo desconocido, que antes desconcíamos, como el de la rutina, aburrimiento, el de una vida monótona, de maltratos de obra o palabra, de celos, y tantas otras situaciones que afloran aquí en la tierra, lejos del paraíso en que estabamos en el periodo de enamoramiento y pasión desenfrenada.

Si después de un tiempo viviendo juntos logran afiatarse, tolerarse, compartir con respeto cada minuto de la vida, los momentos de felicidad, de alegrías, de penas, tristezas, y sobrellevar todo tipo de obstáculos y problemas, ya pueden pensar en el matrimonio.

Si consideran que al convivir y fracasar en el intento de compartir una vida en común, cada cual puede partir por su lado, sin más gastos que pagar su parte de las cuentas domésticas, es un alivio comparativamente con lo que representa romper un vínculo matrimonial, en el que hay que contratar y pagar los honorarios de un abogado para el divorcio, pagar gastos notariales, papeleo, pérdida de tiempo en audiencias judiciales, tal vez desembolsar una compensación económica para la pareja, un tremendo gasto económico y desgaste emocional que se ahorra cumpliendo ese "periodo de prueba".

Piense : si se exige un periodo de reflexion de un año para poder divorciarse consensuadamente , y de tres años para un divorcio unilateral, ¿no le parece razonable un periodo de reflexión, léase "de convivencia", de a lo menos 6 a 12 meses para casarse? ¿ O usted piensa que la decisión de divorciarse es mucho más importante que la de casarse ?

Ricardo Viteri Prado - Director www.separadosdechile.cl