Jorge Rojas, presidente de Coaniquem, dio a conocer la preocupación que tiene por el número de niños quemados hasta el día de hoy y acusó que hubo una importación ilegal de fuegos artificiales este año, antes del estallido social, que llenó el país de estos elementos, los que son ilegales según la legislación chilena.

Asimismo, también lamentó la sobreoferta de esta pirotecnia para uso casero, lo que está prohibido desde el año 2000 por la Ley 19.680.

"Hubo un hecho previo al 18 de octubre, una importación masiva, ilegal y dolosa, personas que lo hicieron mal y que internaron con documentos falsos a través de aduana grandes cantidades de fuegos artificiales que llenaron el país. Esto no se había visto nunca en Chile", señaló Rojas.

"Esta sobreoferta de fuegos artificiales ha significado que la gente haya perdido la visión y recordar que esto es sumamente peligroso, entonces al estar en la calle vendiéndose sin dificultades", indicó el fundador de la Corporación.

En dicho contexto, lo que preocupa a Rojas es que durante la noche del Año Nuevo es cuando se concentran mayores casos de personas quemadas por el uso de estos elementos.

El llamado es a denunciar la venta de fuegos artificiales. "Esto ha quebrado la tendencia de Chile de haber sido un país ejemplar en la conducción del fenómeno y que ahora estamos enfrentados a que la gente no los use, no los compre y denuncie, que es la única forma de protegernos", comentó.

"El llamado es a denunciar, decir que aquí están vendiendo, por otra parte, no usarlos bajo ningún punto de vista, porque son peligrosos y hay que aislar a los comerciantes que están haciendo esto, tienen que cambiar su actitud", puntualizó Rojas.