Banderas Negras en Aysén

Banderas Negras en Aysén

16 Febrero 2012

Hoy, el ciudadano aysenino está cansado de tanta teoría e innumerables reuniones, mesas de trabajo y talleres, que no han dado los frutos esperados y, solo demuestran que el gobierno solo hace una teatralización.

Andrés Gillmore >
authenticated user

En Aysén, desde hace un largo tiempo existe un descontento casi general con la manera en como se han estado haciendo las cosas en materia de políticas públicas y la forma en que se ha estado administrando la región. Esto no sólo tiene que ver con el tema de las represas, que es sin duda el gran tema de la región. También en el día a día existen otros temas de igual importancia y relevancia, que hacen que de forma global la calidad de vida de la clase media aysenina haya bajado ostensiblemente en la región y esto produzca un descontento importante en los habitantes comunes. No podemos decir que estos efectos se hayan producido sólo bajo la administración del actual gobierno. Si somos verdaderamente justos, tenemos que decir que hay muchos temas que este gobierno heredó del gobierno de la Sra. Bachelet, pero eso en la práctica no cambia en nada la actual realidad de la región. Lo que se quiere en verdad, es una real solución de base a los problemas actuales, estos vengan de donde vengan.

La realidad social de Aysén ha cambiado ostensiblemente en los últimos años, debido a una migración importante, que ha llegado en forma contundente para los parámetros regionales, por gente en busca de mejores horizontes y posibilidades de vida en nuestro querido Aysén. No sólo se trata de obreros, también de profesionales jóvenes que han visto en la región una oportunidad de hacer cosas, que para bien o para mal ha saturado el sistema y el mismo ordenamiento social. Las autoridades necesitan tener la claridad suficiente de este cambio social de relevancia en nuestro territorio y de lo que significa llevar adelante las políticas sociales en este nuevo escenario, con una proyección eficiente, que necesitamos en materia de desarrollo y de justicia social.

Lo que ha marcado la preponderancia mas que nada en el descontento actual, es que la esperanza que se tuvo con el gobierno del Pdte Piñera, de que las cosas se harían mejor, que habría mas altura de mira en la forma de hacer, ha quedado totalmente en el olvido y ha surgido como siempre en estos casos, el resquemor del fraude. De sentirnos pasados a llevar por el gobierno y ver que las esperanzas que tuvimos de una administración más adecuada y más certera no ha llegado en lo absoluto, produciendo desesperanza. Nos hemos dado cuenta que lo que tenemos hoy es solamente mas de lo mismo y, eso ha sido un punto de inflexión tremendo a la hora de evaluar, que nos tiene tremendamente complicados en Aysén, por decir a lo menos.

El tema que más ha marcado esta posición en gran parte de la población de Aysén, es que las actuales autoridades que deberían representar los intereses de Aysén, han hecho caso omiso de lo dicho en la campaña política y solo se han guiado bajo las directrices de los mandos de palacio, sin capacidad de luchar por lo que queremos y por lo que nos fue prometido. No han sabido hacerse cargo de esa intención, cayendo por esto mismo en las profundidades del centralismo de siempre. Incluso los mismos políticos que fueron elegidos para ello, como senadores y diputados, que en teoría deberían estar atentos a los requerimientos reales de las verdaderas necesidades de la población, por intereses personales en temas de importancia, han callado y su voz no se ha escuchado en lo más mínimo de acuerdo con los parámetros ayseninos. Con la sola honorífica salvedad del senador Horvarth, quien a pesar de la imposición de su partido, RN, que están interesadísimos en aprobar los proyectos de las represas en Aysén a como de lugar, ha sabido representarnos con honor en el tema oponiéndose tenazmente a ellas, por la convicción de que estos proyectos no son buenos para la región. Aunque para ello se enemiste con la misma moneda y su propio partido, tanto en Aysén como en Santiago.

Esta semana lo que ha desbordado nuevamente el vaso, es uno de los grandes temas de siempre en Aysén, el tema de los pescadores artesanales. Gremio importante y de relevancia, que vienen pidiendo desde hace muchísimo tiempo medidas urgentes, para que no se siga permitiendo la destrucción total del litoral aysenino y, por ende de la pesca artesanal, que es la base de sustentación económica de innumerable familias del litoral aysenino, que dependen de esta actividad para su sustento. Que lamentablemente por políticas publicas “equivocadas”, las decisiones que se han tomado, solo han beneficiado a los grandes industriales del rubro y exterminan los recursos que en primera instancia deberían favorecer a los pescadores ayseninos, pero que hoy benefician a otras regiones y no al mismo Aysén como debería ser. La misma CUT ha venido discutiendo por un sueldo mínimo regionalizado de Zonas Extremas, en pro del respeto al acuerdo que se tomó en la mesa publico-privada del año pasado, con relación a la ley 889, que garantiza condiciones y reajustes en los sueldos para las zonas extremas, de algo que no se ha cumplido y que se ve no se respetara si no se presiona para ello.

Los productores de leña también se vienen quejando que no son tomados en cuenta con la seriedad que se merece por las autoridades. Tema que para Aysén de importancia vital, en una región en donde el invierno dura casi 7 meses, con temperaturas de hasta 15 negativos. Gremio que ha venido solicitando un protocolo de trabajo y la confección de un reglamento eficaz, que entregue igualdad de condiciones a los pequeños productores y a los distribuidores.

Estos hechos indudablemente han cansado a los habitantes de Aysén y a los distintos gremios y organizaciones ciudadanas, que se han reunido y han acordado unánimemente dar comienzo a un gran movimiento, con movilizaciones de carácter netamente aysenino, totalmente a político y transversal, con el objetivo de cambiar la realidad actual y mejorar las políticas de desarrollo regional.

Hoy el ciudadano aysenino, está cansado de tanta teoría e innumerables reuniones, mesas de trabajo y talleres, que no han dado los frutos esperados y solo demuestran que el gobierno solo hace una teatralización. Pero que a fin de cuentas se hace lo que ellos quieren, sin escuchar a los propios interesados, en este caso los ayseninos. Para esto la organización PATAGONIA UNIDA, organización de carácter ciudadano a política y transversal, que agrupa a la CUT, ANEF, CORPORACIONES PRIVADAS, JUNTAS DE VECINOS Y ASOCIACIONES GREMIALES y a PATAGONIA SIN REPRESAS, se han organizado con el objetivo de que se respete la región de Aysén como “Reserva de vida” y que los mismos ayseninos decidamos nuestro futuro.