Con la llegada de la primavera, comienzan también las llamadas alergias estacionales. Se trata de un grupo de síntomas que muchas veces tienden a confundirse con un resfrío común pero son la reacción a ciertos estímulos, que nos pueden causar más de un disgusto.

Como dato, el porcentaje de población alérgica a nivel mundial, bordea el 20 por ciento; una cifra no menor que ha aumentado en forma exponencial en las últimas décadas. En la población escolar, este porcentaje llega a un 30 por ciento.

Por otro lado, en 7 de cada 10 alérgicos, se obtiene el antecedente hereditario. O sea un familiar cercano que padece el cuadro y la mayoría desarrolla la enfermedad durante la infancia y la juventud.

A pocas semanas del comienzo de la primavera más vale estar informados: si bien existe un tipo de alergia llamada “Persistente o Peremne”, que se refiere a la reacción a inhalantes intrahogar, existe una alergia exclusivamente Estacional o Primaveral. Esta es algo menos frecuente, pero su sintomatología la hace más evidente.

En las manifestaciones, destacan el prurito ocular o sensación de picor en los ojos, secreción nasal serosa abundante, crisis de estornudos, prurito nasal, faríngeo y tos, entre otros.

¿Cómo diagnosticar? Nelly Prado, directora de la carrera de Enfermería de la Universidad Autónoma de Chile explica que habitualmente se detecta esta enfermedad por sus manifestaciones clínicas. “Hay congestión nasal, rinorrea, tos y obstrucción bronquial. Además hay que realizar exámen físico, en que destaca la observación de algunos estigmas alérgicos,  pudiendo complementarse con algunos exámenes de laboratorio como test cutáneo o prick test además de exámenes de laboratorio”, sostiene la profesional.

Las molestias que pueden llegar a producir las alergias están más que claras, pero existen alternativas para mejor la  calidad de vida, en estos meses que se aproximan.

El tratamiento generalmente consta de medidas generales y manejo farmacológico, primero, evitar el contacto con el alérgeno. En la alergia persistente, es importante un aseo riguroso, ventilación de las habitaciones, aspirado diario y pasar paños húmedos en los muebles. Atención con mascotas, alfombras, y peluches, recomienda la profesional.

En la alergia primaveral las medidas generales, son menos eficaces. De todos modos se recomienda circular en el auto con ventanas cerradas. Es importante destacar que nada reemplaza un buen tratamiento médico farmacológico, indicado por un profesional competente; un médico broncopulmonar, pediatra, otorrino o alergólogos.

Lo importante, entonces, primero que todo es identificar a qué somos alérgicos y luego, tomar las medidas terapéuticas correspondientes.

 La experiencia dice que es posible tener mejor calidad de vida,  pues si bien el sol vuelve al cielo del sur de Chile en primavera, acompañado de las alergias, existe manejo terapéutico eficiente para controlar sus molestias.