Aguas Tranquilas: Entre eclipse y peajes

09 Octubre 2020

Eclipse solar total, 1 minuto 18.1 segundos de total oscuridad. Este es el único evento que, por temas sanitarios, nadie podrá suspender (ni siquiera un ministro), el evento va sí o sí.

Eric Kleinsteub... >
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Al medio día el 14 de diciembre de este año, en Lanco, que en Mapudungun significa “Aguas Tranquilas” será el mejor lugar de la región de los Ríos para observar, vivir y sentir una experiencia que hace más de trescientos años no ocurre en este lugar. El día se transformará en noche, ya que habrá un Layantü, la “muerte del sol” según la cosmovisión mapuche.

Eclipse solar total, 1 minuto 18.1 segundos de total oscuridad. Este es el único evento que, por temas sanitarios, nadie podrá suspender (ni siquiera un ministro), el evento va sí o sí. El cosmos, la naturaleza los seres que habitan Lanco, serán testigos privilegiados de esta lucha entre el sol y la luna, la luz y la oscuridad.

Si calculamos las probabilidades de que justo en el lugar donde vivimos ocurra un eclipse de estas características, es muy probable que no coincida en vida. Pero quizás, es más improbable que justo en medio de un estallido social, en medio de una pandemia causado por un virus que acecha nuestra vida y la de todas y todos los habitantes del circular planeta (que me disculpen los terraplanistas), en medio de todo eso, de los bonos, del retiro del 10%, las reuniones por zoom, las clases on line, los delivery y las series de Netflix, como si las casualidades existieran, ocurre lo inesperado, lo que matemáticamente parecería una locura, finalmente sucede.

Ya no es tiempo de lamentaciones, pero ¿cómo no pensar en lo importante que podría ser para sus habitantes, ver este evento como un paréntesis a este escenario extraño y caótico?, además se abre como una oportunidad bisagra para activar la economía local, ¿cómo no pensar en los artesanos que harán tallados en madera o tejidos en lana como recuerdos y los restaurantes que esperan ser iluminados con ese nuevo rayo de sol que esperamos empape con su luz a todas y todos quienes necesitan esa energía?.

Es importante relevar a los que ponen su esperanza en que no haya cuarentena, y así poder recibir a los visitantes; ¿cómo no pensar en los distintos emprendimientos turísticos rurales que se han preparado con los protocolos sanitarios respectivos?; ¿cómo no pensar en 20 años atrás cuando a nuestro Lanco querido lo ataron de manos, con un peaje en su entrada norte, otro peaje en la salida sur, un by pass que lo aisló en pro del progreso de Chile. Quizás esos 300 años entre eclipse y eclipse, me parecen menos tiempo que estos 20 años castigados como comuna económica y emocionalmente.

Hoy cuando hay una posibilidad de estar en el ojo del mundo y dar a conocer nuestro territorio, seguimos amenazados por un virus, por desigualdades y por un largo etcétera… pero como ya se ha dicho, no es tiempo de lamentarse, sino de venir a Lanco levantar la vista y vivir juntos la experiencia de que nos iluminé el mismo sol.