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¿ALGUIEN PREGUNTO POR MI FAMILIA?

Me Duele saber que por haber estado expuestos al ?fracaso?, hoy se nos critique, acuse y culpe. Nadie se pregunta el porqué, solo es el dedo acusador que como en tiempos romanos decidía quién vivía o quien moría. Por cierto somos responsables de nuestros actos.

Para la crisis asiática mi PYME se afectó, debí responder por el descalabro económico que esto me genero, siempre reconocí mi responsabilidad sobre lo sucedido, mi exceso de confianza, mi juventud, mis ganas de tener algo propio y dar trabajo, de descubrir mis habilidades y fortalecerlas, no obstante, nunca aceptaré mi responsabilidad por el famoso termino ?DOLOSO?. Hay casos como el mío, he imagino el del actual gobernador, en los cuales esa palabra no representó en rigor nuestra intención frente al fracaso. Esta palabra se ocupa jurídicamente, y pareciera que es así como se da el golpe de gracia, que nos pone del otro lado de la vereda quedando escrachados como un ?personaje peligroso?.

Gracias a Dios, soy de las personas que ve el vaso medio lleno, el que se fortalece si no lo matan.. El que cree en el fracaso como un medio para volver a empezar, en mi caso y en el caso de nuestro nuevo gobernador, hemos renacido como el ave fénix, sacando adelante nuestras familias y creando fuentes laborales, aportando con esfuerzo y amor a nuestra patria, y consumiendo nuestras vidas en pos de entregar a los demás algo de nuestras fortalezas y porqué no de nuestras debilidades.

Estimado Gobernador: fuerza y dignidad, hay quienes se molestan con el éxito de los demás.

Mi experiencia de la crisis asiática esta plasmada en el libro ?MI FAMILIA DESPUES DE LA CRISIS DEL 97?.

Juan Carlos Mendoza N.