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Hermanos Mapuches: En estas pocas lìneas, deseo pedirles perdòn en mi nombre y en el de aquellos chilenos que, con su silencio, han permitido que se les cazara como bestias, que se les despojara de sus tierras y que fuesen tratados con desprecio por otros chilenos, que de chilenos tienen solo el nombre y que dicen ser orgullosos de su paìs sin haber hecho algo contra las injusticias sufridas por sus compatriotas.

Hace tiempo, a quien luchaba por su tierra y sus derechos le llamaban patriota, ahora le llaman terrorista.

Todo esto es obra de aquel Estado garante de los intereses de grupos que de siglos han ejercido el poder en Chile, garante de las poltronas polìticas (ya sean de derecha como de izquierda).El hombre polìtico que miraba por el bien de todo el pueblo (si alguna vez existiò) ha muerto y naciò el polìtico del negociado, cuyo fin es el poder, la riqueza y la consolidaciòn de su status.

El remedio a tanto mal està en el pueblo, no se debe callar, debe denunciar a viva voz las injusticias que le atañan a cualquiera de sus componentes (mapuches, mineros, obreros todos) porque al final la culpa no es solo del que hace, sino tambièn del que calla.Quien calla otorga.

Un abrazo al pueblo mapuche y no aflojen.No firmo como winka porque guardo la esperanza de que alguna gota de sangre mapuche corra por mis venas.