Ser santiaguino, penquista o porteño es un signo de orgullo, y temuquense?
"Nací en Temuco, morire en paz" decía una polera que regalaba la desaparecida tienda Picasso.
Para los nacidos en este pedazo de tierra cercado entre el cerro ñielol y el río Cautin, uno de los actos de defensa de nuestro origen es aclarar nuestro gentilicio, "No somos temucanos, somos temuquenses" (temucano hemos autorizado sólo a uno). Pero, qué es ser temucano...O que no debiera ser... Es haber subido una sola vez al cerro ñielol y desconocer cual es su importancia histórica. Es no saber contar hasta 10 en mapudungun. Es desconocer la ubicacion de la casa de Neruda o la de Gabriela. Es no saber el nombre de las plazas. Es mirar la olleta, el martillo y el arado y pensar que son adornos. Es mirar con envidia los vestidos de bolocco, y no haberlos comprados cuando se hacian en Temuco. Es no haber visto un partido del Santos, y perderse el nacimiento de un genio. Es no tener recuerdos de viajes en tren o en carreta de bueyes. Es no soñar con volcanes al tomarse un cafe en La Central.
Es, además, no saber que hay una argolla para amarrar caballos en el centro¡¡¡
Hay muchas mas, pero lo importante es sentir que esta ciudad es nuestro hogar.
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Foto: Flickr/urbatem/alvarojimenez