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Luis Guajardo vive en el sector de la Vega en Alto del Carmen. Junto a su esposa Alejandra Acevedo y sus hijos se establecieron hace más de 5 años provenientes de la región de Coquimbo en el valle con un sólo propósito que es vivir del campo, enseñando y compartiendo con la gente lo que producen.

Bajo su emprendimiento “Raíces” producen queso de cabra artesanal con variedades de merkén, curado de vino, y albahaca/orégano entre otras recetas, junto a un exquisito manjar de leche que son la carta de presentación de este matrimonio de alegres y esforzados campesinos. Pero además de los animales esta pareja administra un predio con árboles frutales como naranjas y paltas, gracias a las condiciones agroclimáticas que esta parte del valle de El Carmen posee.

El tesón, la perseverancia y la resistencia de Luis junto a su familia han cimentado sus vida, que terminó prevaleciendo en esta familia que hoy se dedica 24/7 a labores de campo como preocuparse de la salud de sus animales, limpiar los árboles, dar abono a los cultivos de su huerta, todos los cuales son la base de su sustento.

“La agricultura más que un estilo de vida es de lo cual vivimos y eso nos tiene muy felices, porque en el mundo de hoy hay cada vez menos agricultura, así que imagínese cómo no nos vamos a sentir completos y agradecidos de la vida por ello”, comenta Luis Guajardo, mientras exhibe junto a su esposa un postre de leche de cabra recién cocinado.

Calidad que alimenta

A poco de haberse instalado en La Vega, los Guajardo Acevedo decidieron construir un corral y una sala de ordeña de cabras para producir la leche con que Alejandra prepara junto a sus hijos un delicioso manjar y queso artesanal.

“Estamos a punto de obtener una resolución sanitaria gracias al trabajo de varios organismos públicos, entre los cuales INDAP [14] es uno los principales entes que nos apoyó y sigue ayudando”. Alejandra se encarga de enseñar en una sala de ventas delante de su hogar algunas variedades de queso de cabra artesanal, mientras Luis se encarga de ordeñar a los animales. Ya la gente los conoce, no sólo por su hospitalidad, sino porque la línea de quesos que están trabajando que ya es considerado un imperdible para quien suba por esta parte de La Vega.

“Para mí hacer agricultura es llenarme de vida, es más que alimento, es un oficio y también nos relaja mucho trabajar en contacto con la naturaleza y lo más importante es que lo hacemos todos con mucho cariño”, comenta Alejandra al tiempo que señala que las ganas de hacer algo realmente atractivo para la gente que sube por Alto del Carmen fue lo que determina la calidad de sus manjares y quesos.

Turismo rural familiar

Como todo emprendimiento que necesita potenciarse, Luis y Alejandra, junto a sus hijos, proyectan crear una experiencia completa que comienza con acompañarlos a ordeñar las cabras, cosechar frutas y verduras en cualquier época de año, alojarse para disfrutar la quietud y el contacto místico de las alturas del valle en Alto del Carmen.

Luis forma parte de un esfuerzo del Gobierno Regional que ha decidido concentrar sus esfuerzos en el turismo como eje de desarrollo en Atacama, con inversiones y asesoría en infraestructura rural; y ellos están dispuestos a dar a pelea para que más y más personas se deleiten con las bellezas naturales que ofrece La Vega.

“Queremos invitar a los pasajeros que vienen en esta época al valle de Alto del Carmen a relajarse y que nos visiten probando nuestros productos que son de calidad insuperable, porque acá en La Vega todo es rico y natural, sobre todo porque están hechos por manos de campesinos y agricultores familiares”

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