“Más que una novela, es una serie”, así es como definen sus fanáticos a la teleserie nocturna de Canal 13, Pacto de Sangre, donde las teorías sobre su final se destruyen en cada uno de los capítulos emitidos.

Y anoche no fue la excepción. Todos pensaban que Gabriel (Pablo Macaya), relataba la historia desde la cárcel, y claro, hasta ayer y tal como iba avanzando el rodaje se presumía que así sería. Pero nadie se esperó lo que se vivió en el casi final de la serie.

La muerte de Gabriel nadie se la tenía prevista, ni mucho menos en manos de Marco (Néstor Castillana), que si bien es cierto, él siempre dijo que lo mataría, nadie le creyó.

Fue entonces cuando los cuatro amigos estaban reunidos en la mesa de la casa de Marco para ponerse de acuerdo sobre la declaración que darían en la policía inculpando a Gabriel sobre la muerte de Daniela Solis y las horrorocidades que ocurrieron después de ello.

Se escuchó un disparo cuando la cámara mostró a Benjamín (Álvaro Espinoza) con sangre en el hombro izquierdo, dando la sensación de que alguien le había disparado, pero no, Gabriel fue quien recibió los impactos de bala, que fueron varios en su cuerpo y uno en su frente. Terminó la escena mostrando a Marco muy calmado empuñando el arma y diciendo: “¿Qué? Me tenía chato ese hueón”.

El inesperado y terrible desenlace del capítulo activó la redes sociales son un sinfín de comentarios, refiriéndose a la genialidad de los guionistas, a la expertiz de los actores y a la sensación de shock que tuvieron cuando lo presenciaron.

Aún quedan dos capítulos más, por lo que se emitirá el capítulo final de Pacto de Sangre este próximo martes.

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