Pedro Peirano y NO, la película: "La campaña del NO mostró lo absurdo de una dictadura"

13 Agosto 2012

"NO, la película" viene cosechando éxitos, antes de su estreno en las pantallas chilenas. El film narra parte de la historia del plebiscito de 1988 y es obra del director Pablo Larraín y del guionista Pedro Peirano. Conversamos con Peirano sobre la película.

Julia Alsina >
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El estreno más importante de esta semana en el cine chileno ha sido, sin duda, "No. La película". Una de las cintas más esperadas de la temporada, que además de generar gran expectativa en el público chileno, también ha cosechado elogios en los festivales internacionales como Cannes. 

La historia del plebiscito de 1988 en Chile está narrada, esta vez, por el director Pablo Larraín y el guionista Pedro Peirano que eligieron la creación de la campaña publicitaria de la franja del NO y toda su articulación para explicar el fin de la dictadura de Pinochet.   

Conversamos sobre la película con Peirano, quien además es periodista, director, dibujante y creador de Plan Z y 31 minutos, donde interpreta la voz de Tulio Triviño Tufillo, uno de los conductores más fanfarrones de la televisión chilena. Su sello también se encuentra en películas tan exitosas como La Nana (2009) y Joven y Alocada (2012).   

¿Cómo surgió la idea de hacer esta película?

Antonio Skármeta llegó donde Pablo Larraín con una obra de teatro sobre el NO que fue el punto de partida de la película. Pablo me contactó a mi, y realmente el tema me pareció ineludible… esa campaña marcó mucho mi adolescencia, la idea de combatir una dictadura así… muy pronto nos dimos cuenta que la obra de teatro funcionaba más como obra que como película, y la curiosidad nos llevó a preguntarnos cómo se hizo la campaña de verdad. Empezamos un proceso de investigación y entrevistas muy largo, hasta que obtuvimos una historia que nos satisfizo.

¿Por qué decidieron escribirla desde el punto de vista de la publicidad, del marketing?

Es uno de los posibles escenarios para contar la historia del plebiscito. Creo que nos apasionó esta campaña ideada por pocos, lejos de la calle, pero que terminó inspirando al movimiento entero. Es una pequeña y grande historia a la vez. Más manejable, y un mundo que conocemos mejor. Nunca pretendimos contar toda la historia del plebiscito. Se pueden contar muchas más.

¿Cuál crees que fue la clave de la campaña del NO que, finalmente, cumplió con su objetivo?

Ingenio. Mostrar que te puedes burlar del verdugo, que pese al miedo aún hay frescura. Le dieron confianza a la gente, le mostraron el absurdo de una dictadura.

Por el contrario, ¿cuál fue el fracaso de la campaña del SÍ?

En términos comunicacionales tenían todas las de perder, tenían que defender a un viejo militar, legitimizar el exitismo económico que no se reflejaba en las poblaciones… pero además lo hicieron muy mal, primero tratando de asustar a la gente y luego parodiando la campaña del No. No se puede parodiar algo cuando ha llegado al corazón de la gente sin caer más profundamente en el descrédito.

Si no me equivoco tenías 16 años para el Plebiscito, ¿cómo lo viviste entonces?

Fue muy entretenido, emocionante y frustrante también, al no haber podido votar que NO.

Además en la película participan personas que fueron protagonistas en la verdadera campaña, como por ejemplo Eugenio Tironi. ¿Cuál fue la respuesta de ellos después de ver la peli? 

Creo que estaban muy contentos con la película, pero aparte se emocionaron mucho al verse. Se produce algo muy raro, es como un documental en ese sentido, un documental de sus propias vidas y creo que eso es fuerte.

¿Cuál es tu opinión sobre la entrevista que dió Patricio Bañados, que también aparece en la película, en la que dice que nunca más lo volvieron llamar? ¿Hubo costos políticos y personales por identificarse mucho con una de las franjas?

Creo que sí. El fue el verdadero rostro del NO en un punto, y creo que puede haberle jugado en contra cuando se trataron de apaciguar las aguas de después. No conozco su historia, sólo sé que es un tremendo profesional, enormemente inteligente. Da un poco de pena que esté tan desencantado de la franja o la llame una tontera, porque creo que históriamente es lo más valioso en lo que participó y sin duda es por lo que lo van a recordar.

¿Se esperaban la repercusión internacional que ha tenido la película?¿Cómo fue la experiencia en Cannes?

La experiencia fue muy emocionante, el aplauso realmente largo. Hicimos la película pensando también en el público de fuera, que no tiene idea de cómo salió Pinochet del poder y realmente se sorprende con la historia. Así que esperábamos que la película apelara a un público más amplio que el chileno. Siempre es una sorpresa que funcione lo que uno prevee, en todo caso. Muy felices.

¿Por qué pensaron en Gael García Bernal como protagonista?¿Qué condiciones reúne para ser el indicado para esta película?

Pensamos en Gael primero porque es un actor de primera línea. A punta de talento y encanto ha llegado a ser conocido. Por supuesto su presencia le da un vuelo más internacional a la película, pero no hubiéramos sacado nada si hubiera sido malo o no se hubiera involucrado tan emocionalmente con el personaje. Creo que fue muy atinado, su actuación es tan convincente que te deja de importar, si te importa, que sea extranjero a los pocos minutos.

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