Debate sobre el aborto: Cosificación

27 Diciembre 2016

Cuando la discusión del aborto se centra en si lo que hay en el vientre materno es o no vida, lo único que se hace es banalizar la discusión. Generan la falsa idea de que solo se están eliminado unas cuantas células, cuando la verdad esas células están destinadas a ser un humano.

Nicolás Ferreira >
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En la previa de los periodos de fiesta siempre encontramos algún bien intencionado que nos trata de recordar que estas fechas son de reflexión y júbilo, y no de agobio y consumismo. Pocas veces eso sí, he visto que este tipo de llamados hagan eco en alguna persona, normalmente sólo nos parecen bonitas palabras y seguimos con nuestro camino. La fiesta de Navidad, Hanukkah, o simplemente el cambio de estación, ya las entendemos como algo con un significado mayor que el de los regalos, sin embargo, mucho hemos optado por demostrar el cariño a quienes tenemos cerca con un presente material, de alguna manera creo que hemos cosificado nuestros sentimientos, así a quien quiero más, le regalo una cosa más cara o más difícil de conseguir, algo que demuestre cuanto me importa.

Quizás en este mundo de “toques” virtuales y “Me gusta” cibernéticos, hemos perdido el manejo de nuestras emociones y esta termina siendo la mejor forma de decir te quiero. Pero la cosificación lejos de ser un síntoma de los últimos tiempos, se ha vuelto una forma de vida constante a lo largo de la historia, tan arraigada en nuestra cultura que casi creemos que cosificar es algo natural, cuando realmente no hay nada más aberrante que quitarle lo sagrado a algo y convertirlo en un objeto inerte, en algo que no siente, algo que podemos destruir sin reparos.

Los derechos de las mujeres han sido violados y pasados llevar por siglos en todas partes mundo, en muchos lugares aún ni siquiera son sujetos de derecho, no pueden votar o estudiar, en otros mucho peores son moneda de intercambio. El género femenino ha sido cosificado por años, por milenios realmente. Una mujer en África tiene más probabilidades der ser violada que de aprender a leer.

La violación es una oda a la cosificación, alguien decide tener placer sexual unilateral a costa de otro, no pide su permiso, no consulta siquiera. La verdad no creo que el violador quiera dañar, simplemente no le importa dañar, no ve una persona, un igual, solo ve un cuerpo, una cosa.

La despenalización del aborto en tres causales en Chile, es algo que se viene discutiendo hace un tiempo, y mi intención no es estar a favor ni en contra de estas causales, no es enjuiciar o criminalizar a aquellas mujeres que por distintos motivos se vieron en la necesidad de abortar, mi reflexión el día de hoy es a no cosificar a esos bebes, que por el motivo que sea, son una vida en formación, son seres humanos que no pueden defenderse y no han cometido falta alguna. Cuando la discusión del aborto se centra en si lo que hay en el vientre materno es o no vida, cuando alguien determina que pasado cierto tiempo es abominable hacer un aborto, pero antes que eso no hay ningún problema, lo único que hace es banalizar la discusión. Generan la falsa idea de que solo se están eliminado unas cuantas células, casi como cortarse el pelo o las uñas, cuando la verdad esas células están destinadas a ser un humano. Esas células al mes tienen corazón y al segundo mes cerebro.

Una mujer que ha sido violada, ha sido vulnerada de la peor manera posible, alguien la trato como una cosa y eso sin duda repercutirá en su vida de irremediable. Si producto de esa violación quedó embarazada, discutamos que es lo mejor tanto para la madre como para el hijo, y si llegáramos a la terrible conclusión de que la mejor opción es el aborto, hagamos el luto necesario y sigamos adelante, pero no nos quieran hacer creer que aquí no ha pasado nada, que nos sacamos un quiste, que desechamos una “cosita” y que no se ha asesinado a un niño que tenía todo el derecho a vivir.