Los últimos acontecimientos registrados en el hospital de Collipulli donde menores de edad fueron atacados por carabineros,  demostró que el denominado “Conflicto Mapuche” está muy lejos de resolverse como algunos creían. Por eso, el presidente Sebastián Piñera estimó que era conveniente realizar una “Cumbre Social” después de la polémica "Cumbre de Seguridad", en la que diferentes actores entregarían su visión para solucionar un problemática diaria en La Araucanía.

Y la primera frase del mandatario sacó ronchas a varios. "La Araucanía sigue siendo, a pesar del progreso, la región con mayor pobreza y con mayor pobreza extrema de nuestro país y, por lo tanto, requiere un trato especial” ¿Frase armada? Lo cierto es que, para muchos, los lineamientos presentados por el Gobierno para tratar el conflicto no han tenido resultados aparentes, algo que se manifiesta con las nuevas medidas adoptadas para tratar el “tema indígena”.

Entre las acciones a realizar aparecen tres ejes: económico-social, cultural y seguridad. Entre las medidas se resalta promover el turismo, la recuperación de la lengua mapuche, la creación de un liceo de excelencia técnico-multicultural en la localidad de Ercilla y que contará con “aulas móviles”. A eso se sumará 18 mil becas para el pueblo Mapuche y 10 a 20 mil cupos para desarrollar estudios de lengua mapudungun con maestros de la propia etnia.

En el área de la salud se anunciaron la instalación de cinco nuevos hospitales donde se incorporará un sistema de terapias ancestrales ¿Y en el ámbito de la seguridad? El presidente fue claro: “Se está impulsando la ayuda y compensación a las víctimas de los atentados violentistas", principalmente a los pequeños agricultores, "para contribuir a un clima de paz para el desarrollo económico y social de la región".

Reacciones

Visitando la comuna de Carahue estaban el senador Eugenio Tuma y el consejero regional Hilario Huirilef cuando se enteraron de las medidas adoptadas por el Gobierno. El primer en manifestarse en desacuerdo fue el parlamentario, quien aseguró que las políticas efectuadas para manejar el conflicto “fracasaron”.

“Decir que La Araucanía necesita un “trato especial” es algo lógico y que se ha repetido durante los últimos años. Acá hay una deuda histórica con el pueblo Mapuche de parte del estado, el que todavía no comprende la verdadera realidad que viven miles de familias que luchan por mantener vivo su pueblo”, dijo Tuma.

Huirilef también se sumó a las críticas. “El pueblo Mapuche necesita soluciones concretas y lamentablemente el estado de Chile no las entrega. La deuda histórica seguirá siendo la bandera de lucha y estas medidas son sólo parches para un problemática mayor”.

Sin embargo, para el Intendente Andrés Molina la lectura es otra. “Aquí plasmamos los sueños de desarrollo y oportunidades para las comunidades mapuches de La Araucanía. Mejoramos la educación y colaboramos de manera concreta a preservar la cultura indígena, la que constituye uno de los patrimonios más importantes del país”.

Por ahora se espera la ejecución de las medidas, las que dejan con un manto de duda en relación a su efectividad.