El presidente de la mesa ampliada de entidades evangélicas, el Obispo Emiliano Soto, la semana pasada visitó la región de La Araucanía, con motivos de compartir en la comuna de Pitrufquén, con un grupo de aproximadamente 100 jóvenes, los que se encuentran realizando campamentos de verano con una mirada social, donde se visita hospitales, centros de prevención y hogares de ancianos.

El Obispo Soto ha sido claro en manifestar el punto de vista de la iglesia evangélica, con respecto al proyecto de ley que despenaliza el aborto bajo tres causales: Cuando está en riesgo la vida de la madre, en caso de violación y frente a la inviabilidad del feto.

Ante a este proyecto de ley que será analizado en marzo por la Cámara de Diputados, Soto declaró, “a nosotros los evangélicos nos preocupa que exista una legislación con respecto al tema del aborto. Estamos por preservar la vida, el resguardo de quien está por nacer”, asegura.

Esta preocupación explica, nace de que exista un planteamiento extremadamente abierto sobre este tema. El Obispo indica que existe un sector de la iglesia evangélica que podría abrirse a una de las tres causales, la que apunta específicamente cuando está en riesgo la vida de la madre, pero en ningún caso cuando existe violación o inviabilidad del feto, “porque entraríamos en una línea de cualquier libertad, a cualquier tipo de condición o situación de aborto en Chile” sostiene.

“Dentro de estas tres causales hay personas que están aceptando el hecho, por causa de la vida de la madre se tenga que preferir el bien mayor, en este asunto la madre por sobre quien está por nacer. Esa causal sería la única por la cual estaría entrando a una apertura en el planteamiento”, explica.

Soto señala que ellos respetan la libertad de decisión de las personas, y que siempre ha existido el libre albedrío, sobre todo teniendo en consideración aquellos casos donde personas han sido violentadas sexualmente. “Nosotros creemos que la solución es la vida, pero tampoco queremos que las personas se sientan coartadas en su decisión”.

Ante el análisis de este proyecto de ley, el Obispo señala cual sería a su juicio el panorama más favorable. “lo más positivo dentro de la llegada o aprobación de una ley de aborto terapéutico, es que se incluya el concepto de la objeción de conciencia, en el sentido que el médico pueda definir si acaso él está dispuesto o no a hacerlo”, indica.

El presidente de la mesa ampliada de entidades evangélicas, advierte que el propósito principal de la iglesia es que el concepto de la vida quede resguardado, asegurando que esta institución no condena a quienes en su vida hayan optado o en un futuro opten por el aborto, “la iglesia está en la condición de acoger la condición de una personas que venga sufriendo la pérdida de un feto, estamos para apoyar e incluir a las personas”, concluye.