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Me parece una verdadera usura lo que hacen los empresarios panificadores en Chile y creo que sí están coludidos y por lo demás es muy fácil que lo hagan cuando en un barrio un par de panaderos de ponen de acuerdo marcan la tendencia para todo el resto de la ciudad.

Es un abuso flagrante y el Ministerio correspondiente debería tomar medidas, y si algún abogado me está leyendo, creo también que se debería interponer un recurso de protección al consumidor en Tribunales por este motivo y hacer valer las leyes que protegen al consumidor ante situaciones ilícitas. La gente en Chile no se anima a acudir a la justicia y los que lo han hecho, han demostrado que no está todo perdido, y han habido en el último tiempo fallos importantísimos castigando a los abusos, como por ejemplo el que castiga a los dueños de estacionamiento donde se han producido robos y acusa de ilegal la práctica de no hacerse cargo por los robos y de ilegal también poner aquellos carteles en los que siempre me habían hecho creer que de verdad al dejar el auto en aquel lugar era yo quien me debía hacer responsable, la justicia desmostró lo contrario a través de la nueva ley del consumidor... será que alguna instancia ciudadana o algún lector abogado podrá acudir a Tribunales y defendernos de los abusadores del precio del pan?.

Los argumentos son claros y simples: cómo se explica que el precio suba desde enero de $520 a casi $1000, cuando en este tiempo con el los insumos básicos (energía, trigo, levadura) han aumentado sólo un 30%. ¿Acaso con las cebollas no ha pasado lo mismo? Las cebollas no han sufrido las heladas porque son productos guardados de antes y su precio se triplica... Hay que distinguir entre oferta y demanda como herramienta de mercado, y entre lo que es abusivo y atentatorio para millones de personas que necesitan comer dignamente y estar al amparo de los oportunistas de siempre, el que ahora es el antaño fuera el querido "panadero", como uno de los más queridos exponentes de nuestro pueblo, parece que todos los modestos panaderos le han dado la espalda a sus vecinos.