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"Me robaron la foto en Facebook"
12 Febrero 2009
Una joven equis puso una foto mía como suya en el perfil de Facebook... Por Sebastián J. Echeverría
Sebastián J. Ec... >
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Esto le paso a mi señora no sabemos bien cuándo. El martes supimos que hace meses una chica de nombre "Valentina" tenía muy puesta en su perfil una foto que yo le tomé a mi señora cuando estábamos de vacaciones el año pasado. Una amiga, haciendo lo que todos hacemos en Facebook, vio la foto de mi señora comentando una fotografía, "qué raro, ¿de dónde conocerá a esta gente?" y al fijarse el nombre del perfil no era el que debía ser.
Nuestra amiga le mandó un mensaje personal a Valentina, diciéndole lo obvio, que la de esa foto no eres tú, sino una amiga mía y no puedes ponerla como tuya. La respuesta fue rápida, la chica sacó la foto de mi señora y se disculpó diciendo que le daba mucha vergüenza... que la hayan pillado, me imagino. Lamentablemente, esto pasó hace meses y recién nos vinieron a contar, no tenemos pantallazo, ni siquiera el nombre completo de Valentina para buscarla y denunciarla.
A propósito de esto, mi señora se pasó toda la noche cambiando las autorizaciones de los cientos de fotos que hemos subido a Facebook, ha inisistido en que yo restrinja mis permisos y ha instalado el tema del cuidado de la información personal en las redes sociales en todas las conversaciones que han tenido lugar. ¿Podrá evitar que algo como esto se repita? Yo no lo creo.
¿Cuántos perfiles de mujeres guapas en bikini hay dando vueltas en Facebook que no son reales? ¿Cuántas cuentas de Twitter hay que no corresponden a la personas que pareciera ser? ¿Cuánto nombre falso hay en miles de correos electrónicos? ¿Cuántas valentinas habrá en Facebook? ¿En Twitter? ¿En Fotolog? ¿En MySpace? ¿Vale la pena seguir enumerando?
Casos como éste debe haber varios y hay algunos peores. Hace unos meses me llegaron varios mensajes de Facebook, anónimos (o sea, con una cuenta con seudónimo), acusando vilmente a un ex compañero de trabajo de varias cosas poco probas. Luego, me llegó un mensaje directo de él mismo diciéndome toda clase de insultos y deseándome toda la desgracia posible en la vida; esto, como adivinarán, desde una cuenta falsa. Alguien, lleno de rencor, creó una cuenta con su nombre para dañar su imagen.
¿Qué podemos hacer al respecto? Varias cosas:
Primero, podemos tomar medidas precautorias, cerrar nuestros perfiles, restringir los permisos para ver las fotos, el muro, los comentarios, etcétera. En Twitter, proteger nuestra cuenta y autorizar o no a cada nuevo follower. Este tipo de cosas, según lo veo yo, es como enrejar la casa, poner alarma y ponerle doble tranca a la puerta de entrada; útil, efectivo y triste.
Segundo, denunciar oficialemente este tipo de actos, utilizar los canales formales para evitar nuevos casos y alertar a "las autoridades" para tomar medidas de seguridad de fondo. En Facebook se pueden denunciar fotos, personas, eventos y cualquier cosa que se estime violenta, sexualmente explícita o inadecuada. (De hecho, hace un tiempo se prohibió poner como foto de perfil una donde se viera a una madre amamantando a su hijo, y todo porque hubo usuarios que se quejaron de esto; aunque esa historia continuó...)
Tercero, socializarlo y aunar el sentido común con los demás usuarios. Ponerlo en nuestros estatus de Facebook, bloguearlo, escribir este artículo, contarlo en todas partes, total, la mayoría queremos usar Facebook con libertad y seguridad. Ésta es la actitud más valiosa. Si queremos nuestro espacio para usarlo, usémoslo y no dejemos que nos lo ensucien un puñado de pelmazos.
Nuestra amiga le mandó un mensaje personal a Valentina, diciéndole lo obvio, que la de esa foto no eres tú, sino una amiga mía y no puedes ponerla como tuya. La respuesta fue rápida, la chica sacó la foto de mi señora y se disculpó diciendo que le daba mucha vergüenza... que la hayan pillado, me imagino. Lamentablemente, esto pasó hace meses y recién nos vinieron a contar, no tenemos pantallazo, ni siquiera el nombre completo de Valentina para buscarla y denunciarla.
A propósito de esto, mi señora se pasó toda la noche cambiando las autorizaciones de los cientos de fotos que hemos subido a Facebook, ha inisistido en que yo restrinja mis permisos y ha instalado el tema del cuidado de la información personal en las redes sociales en todas las conversaciones que han tenido lugar. ¿Podrá evitar que algo como esto se repita? Yo no lo creo.
¿Cuántos perfiles de mujeres guapas en bikini hay dando vueltas en Facebook que no son reales? ¿Cuántas cuentas de Twitter hay que no corresponden a la personas que pareciera ser? ¿Cuánto nombre falso hay en miles de correos electrónicos? ¿Cuántas valentinas habrá en Facebook? ¿En Twitter? ¿En Fotolog? ¿En MySpace? ¿Vale la pena seguir enumerando?
Casos como éste debe haber varios y hay algunos peores. Hace unos meses me llegaron varios mensajes de Facebook, anónimos (o sea, con una cuenta con seudónimo), acusando vilmente a un ex compañero de trabajo de varias cosas poco probas. Luego, me llegó un mensaje directo de él mismo diciéndome toda clase de insultos y deseándome toda la desgracia posible en la vida; esto, como adivinarán, desde una cuenta falsa. Alguien, lleno de rencor, creó una cuenta con su nombre para dañar su imagen.
¿Qué podemos hacer al respecto? Varias cosas:
Primero, podemos tomar medidas precautorias, cerrar nuestros perfiles, restringir los permisos para ver las fotos, el muro, los comentarios, etcétera. En Twitter, proteger nuestra cuenta y autorizar o no a cada nuevo follower. Este tipo de cosas, según lo veo yo, es como enrejar la casa, poner alarma y ponerle doble tranca a la puerta de entrada; útil, efectivo y triste.
Segundo, denunciar oficialemente este tipo de actos, utilizar los canales formales para evitar nuevos casos y alertar a "las autoridades" para tomar medidas de seguridad de fondo. En Facebook se pueden denunciar fotos, personas, eventos y cualquier cosa que se estime violenta, sexualmente explícita o inadecuada. (De hecho, hace un tiempo se prohibió poner como foto de perfil una donde se viera a una madre amamantando a su hijo, y todo porque hubo usuarios que se quejaron de esto; aunque esa historia continuó...)
Tercero, socializarlo y aunar el sentido común con los demás usuarios. Ponerlo en nuestros estatus de Facebook, bloguearlo, escribir este artículo, contarlo en todas partes, total, la mayoría queremos usar Facebook con libertad y seguridad. Ésta es la actitud más valiosa. Si queremos nuestro espacio para usarlo, usémoslo y no dejemos que nos lo ensucien un puñado de pelmazos.
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