Hacer un comentario

Imagen de Oscar Alarcón

Con el triunfo del

Con el triunfo del castrismo, se produjo en Chile, como en toda A.Latina, una gran influencia, especialmente en los extremadamente politizados jóvenes de la época. En Chile se funda el MIR, castrista y guevarista, que propicia la "lucha armada" y da comienzo a los asaltos a bancos, denominadas "expropiaciones". Por otra parte, el sector representado por la ortodoxia comunista, siempre fiel a los dictados de la URSS, no veía con buenos ojos estos movimientos. Se acusaban mutuamente de "aventureros" y "reformistas". Los socialistas hicieron suyo también el concepto de vía armada, como único medio para llegar al poder.

Los hechos de violencia política empiezan a crecer con gran fuerza. En el Gobierno de Alessandri, se registran unas 400 personas afectadas en ese período de seis años. En el Gobierno de Eduardo Frei, ya sube en los seis años a la cantidad de cerca de 1000 personas. En el gobierno del Compañero Allende, la espiral de violencia política llega alrededor de 3.500 personas afectadas, en sólo 3 años.

Las tomas de terrenos, de propiedades, la lucha permanente en las calles entre partidarios y contrarios a la UP, las incautaciones de centros de producción, la formación de cordones industriales, las contínuas amenazas proferidas por la prensa de la UP en contra de la oposición, de las instituciones y de las Fuerzas Armadas, crea poco a poco un terrible clima de odio y resentimiento entre la gente, agravado por el desastre económico, la inflación y el desabastecimiento.

Muchos han dudado de la sinceridad de Allende de respetar la legalidad y la democracia. Si bien llegó a la Presidencia en elecciones libres, aunque sólo con una mayoría relativa, en entrevista concedida al ideólogo francés Regis Debray, le confesó que el acatamiento de su parte de la legalidad burguesa la aceptó como una necesidad táctica para llegar al poder.

Por otra parte, en el afán de dominar el aparato productivo se incitaba a los trabajadores a tomarse las industrias, hecho lo cual, el Gobierno nombraba un "interventor" quien administraba dicho centro de producción con la colaboración de un Consejo designado por los trabajadores obviamente de izquierda. Con esta novedosa fórmula económica, el desastre no se hizo esperar. Las cifras de producción se vinieron al suelo, y el desabastecimiento con su secuela el mercado negro se hicieron pan de cada día, donde la población debía formar largas colas para conseguir con suerte algún abastecimiento.

En 1973 el Estado era "propietario" del 70% de las industrias arrebatadas a sus dueños, mediante los "resquicios legales" Por otra parte la emisión inorgánica de circulante, destinada a crear un falso sentido de poder adquisivo devino en la fabulosa inflación de más del 500% anual. Las desafortunadas medidas producen una pérdida del PIB equivalente a la producción de cobre de siete años.Ante la imposibilidad de pagar la deuda externa, se debió declarar en bancarrota. En Septiembre de 1973 el Banco Central tenía una reserva de tres millones de dólares, es decir para una importación de alimentos de dos días. El país estaba técnicamente quebrado.

Son estas las realidades tristes del Gobierno de la Unidad Popular. Muy distintas del cuadro paradisíaco y embellecido con que se cuenta hoy el Mito.

Responder

El contenido de este campo se mantiene privado y no se mostrará públicamente.
  • Las direcciones de las páginas web y las de correo se convierten en enlaces automáticamente.
  • Etiquetas HTML permitidas: <a> <em> <strong> <cite> <code> <ul> <ol> <li> <dl> <dt> <dd> <p> <br>
  • Saltos automáticos de líneas y de párrafos.

Más información sobre opciones de formato

Aqui podría estar su imagen. para registrarse, haga clic aquí.

CAPTCHA
Queremos saber si eres una persona y no un robot, por eso responde este siguiente formulario.