Carta a los Villarricenses

Viendo algunas fotos de la Costanera de Villarrica en un grupo de Facebook que no la apoya, leí un comentario de una vecina que no voy a dar su nombre. En el me nombra como principal detractor de la Costanera, y asegura que yo compré un sitio en la zona, no entendí bien la ubicación....

Les escribo porque, obviamente, no es verdad, no tengo suficiente dinero para hacer ese tipo de inversiones, y no he comprado absolutamente nada. Ojalá pudiera.

Cuando me opuse al proyecto de la "costanera" lo hice con la mejor de las intenciones, tratando de aportar a la ciudad y sus habitantes, desde mi experiencia profesional, alertando de un proyecto que estaba mal concebido.

Un proyecto de esta magnitud e importancia para la ciudad debió haber sido planteado desde el punto vista del Urbanismo, y no como una solución vial, esto ya se ha dicho innumerables veces y todos los actores involucrados han estado de acuerdo en esto, no vale la pena seguir ahondando en ello.

En todo caso gracias a ello el proyecto fué mejorado en forma importante, y aún estamos negociando modificaciones que lo mejorarían aún mas.

Me he retirado, momentáneamente, de la discusión pública justamente para tratar de evitar este tipo de comentarios, que solo sirven para exacerbar las bajas pasiones de gente mal informada, que opina sin saber lo que dicen.

No quise contestarle en el mismo grupo de Facebook porque no voy a entrar en una discusión tan baja, pero al menos me interesa que la gente de Villarrica sepa que se están diciendo muchas cosas que no llevan a una buena convivencia, y que tenemos que ser cuidadosos y tratar de conservar y cultivar el amor entre los Villarricences y no hacer caso de las odiocidades gratuitas que no nos llevan a ninguna parte.

No es el último proyecto de inversión que se hará en nuestra comuna, y tenemos que estar unidos y atentos para que esas inversiones se hagan de la mejor forma posible.

Si queremos construir una mejor Ciudad que albergue una mejor Sociedad, tenemos que ser responsables de nuestros dichos y nuestros actos, informarnos debidamente y opinar cuando estemos seguros de lo que vamos a decir y con la mejor de las intenciones.

Así podremos ir forjando un mundo mas amable y amoroso.

Con cariño me despido

Manolo Gaete